La receta de hoy presenta un delicioso pudín sin huevo y sin horno, perfecto para deleitar a la familia. Este postre se destaca por su simplicidad tanto en la preparación como en los ingredientes, que son fáciles de encontrar y manejar. El proceso consiste en calentar los ingredientes y luego dejar que el pudín cuaje en el refrigerador, resultando en un postre refrescante y exquisito. Ideal para quienes buscan opciones rápidas y sabrosas, este pudín promete ser un éxito en cualquier reunión familiar.
Ingredientes
- 400 g de leche condensada
- 200 ml de nata o crema de leche (mínimo 35% de materia grasa)
- 2 sobres de cuajada (o 100 g de maicena/alidón de maíz)
- 400 ml de leche entera (opcional)
- Caramelo líquido